martes, 3 de junio de 2008

¿Cuándo cambió el nombre?

Cambió en 1810, momento de la firma del Acta de la Independencia. Cabe destacar que a los habitantes de esta ciudad siempre se les reconoció el patriotismo, las virtudes artísticas y para la creación artesanal. Desde un principio los españoles expresaron que ‘Caracas era la llave del reino de Perú’, pues según ellos, existía una cercanía al mar y sus ríos tenían oro. Además se oficializó como capital del país en 1777, cuando se crea la Capitanía General de Venezuela, cuya sede estaría en este valle, donde están y siguen estando los poderes fundamentales del país. Caracas y sus esquinas La capital de Venezuela es una ciudad cuyas esquinas se identifican con nombres muy particulares. “Cuando la ciudad comenzó a poblarse, las cuatro calles que existían se llamaban Calle Real. En ese momento, la gente empezó a colocarles nombres representativos a esos sitios de encuentro según los sucesos que allí ocurrieron. Un ejemplo de ello está en la parroquia Candelaria, con la esquina Ojo Pela’o a Peligro”.
Santiago de León de Caracas, nombre original de la ciudad, inicia su vida poblacional casi cuarenta años después de Coro y veintidós después de El Tocuyo; el año de su fundación, aceptado por la mayoría de los historiadores, es 1567, a pesar de no haberse encontrado -sí es que existe- el acta que certifique este dato histórico. Se acepta por lo tanto la fecha de 25 de julio de 1567 como la de fundación de la ciudad. El primer gobernador en fijar su residencia en Caracas fue Juan de Pimentel, quien desembarcará en las costas de Caraballeda el 8 de mayo de 1576 y de inmediato subirá a Caracas «... donde tomó posesión del gobierno de la Provincia, y estableció allí su casa, quedando desde entonces, de hecho, la recién fundada ciudad como cabeza de la Provincia...» Juan de Pimentel en la relación que redacta en 1578, deja para la historia el primer plano de la naciente ciudad. Pero es Diego de Henares el autor del trazado cuadricular de la ciudad de Caracas, éste la orientó exactamente entre los siguientes límites: de norte a sur: entre la quebrada de Catuche al oeste, la quebrada de Caroata hacia el oeste, el Guaire al sur y al norte la montaña. El trazado cuadricular marcado por Diego de Henares en el momento de la fundación de la ciudad, persiste en el contexto de la metrópolis actual y adquiere valor de elemento originario por ser el documento más antiguo con que cuenta la ciudad. El área urbana correspondiente al primer plano, se reducía al cuadrado inscrito entre las esquinas llamadas hoy: Cuartel Viejo, Abanico, Doctor Díaz y Gorda, estaba cruzado por cuatro esquinas de norte a sur y otras cuatro de este a oeste. La ciudad resultaba así dividida en veinticinco manzanas de las cuales la del centro era la Plaza Mayor.

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